Retrato de un niño del pueblo de Arrieta. Una parte muy importante de la obra del fotógrafo Javier Reyes Acuña consiste en retratos, que bien realizaba en su modesto estudio de Haría o en bien en los pueblos del norte de Lanzarote.
Fotografía de dos amigas del pueblo de Haría. Una parte muy importante de la obra del fotógrafo Javier Reyes Acuña consiste en retratos, que bien realizaba en su modesto estudio de Haría o en bien en los pueblos del norte de Lanzarote.
Imagen de una señora con unas niñas posando junto a un coche de la época en Mala. Una parte muy importante de la obra del fotógrafo Javier Reyes Acuña consiste en retratos, que bien realizaba en su modesto estudio de Haría o en bien en los pueblos del norte de Lanzarote.
El maestro José Domingo Pérez Núñez retratado en un campamento. Este joven nacido en Haría compaginaría a lo largo de su vida la enseñanza (especialmente centrada en el ámbito deportivo) con el desempeño de varios cargos políticos, tanto en el ayuntamiento de su pueblo natal como en el Cabildo de Lanzarote, donde ocupó las consejerías de Agricultura, Obras Públicas, Economía y Hacienda y Cultura y Deportes, entre otras.
Bailes en el C.C.A. de Haría. Una parte destacada de la colección de Javier Reyes pertenece a imágenes de fiestas en los pueblos del norte de Lanzarote. En esos bailes, Reyes sacaba fotografías a los asistentes que luego vendía en su modesto estudio del pueblo de Haría.
Retratode una señora del pueblo de Máguez. Una parte muy importante de la obra del fotógrafo Javier Reyes Acuña consiste en retratos, que bien realizaba en su modesto estudio de Haría o en bien en los pueblos del norte de Lanzarote.
Imagen de unos niños posando junto a un coche de la época en Mala. Una parte muy importante de la obra del fotógrafo Javier Reyes Acuña consiste en retratos, que bien realizaba en su modesto estudio de Haría o en bien en los pueblos del norte de Lanzarote.
Bailes en el C.C.A. de Haría. Una parte destacada de la colección de Javier Reyes pertenece a imágenes de fiestas en los pueblos del norte de Lanzarote. En esos bailes, Reyes sacaba fotografías a los asistentes que luego vendía en su modesto estudio del pueblo de Haría.
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